LowCost & Trendy: Diccionario para principiantes: calzado

Podemos llamar zapatos a cualquier cosa que nos pongamos en los pies, pero también podemos hablar con propiedad y llamar a cada cosa por su nombre.
Hoy vamos con unos cuantos términos para nombrar de forma precisa a cada tipo de calzado, muchos ya los conoceréis pero seguro que os descubrimos alguno nuevo.
Y como serían muchos los tipos de calzado a enumerar, hoy vamos a centrarnos únicamente en los que llevaremos de aquí a unos meses, las botas las dejamos para un post sucesivo.

Salones, zapato de salón o pump: zapato de tacón, generalmente cerrado que deja libre el empeine, sin pulseras ni otro tipo de ataduras. Es el must have por excelencia, toda mujer debería tener unos salones en su fondo de armario. Realmente este tipo de zapato puede tener diversas alturas, desde el más plano o bailarina, hasta el tacón de aguja o stiletto.

Mary Jane o merceditas: si a los anteriores les añadimos una pulsera o tira que atraviesa el empeine de lado a lado y generalmente sujeto por una hebilla, botón o velcro. Los merceditas también pueden verse sin tacón, zapato tradicional de las niñas.

Salomé: se diferencia del Mary Jane en que en este caso el zapato lleva una tira sobre el empeine que une la pala o empella (parte del zapato que cubre el pie desde la punta hasta la mitad) con la pulsera del tobillo.

D'orsay: zapato estilo salón o Mary Jane, con talón y pala cubiertos, pero muy escotados en los laterales, que dejan al descubierto los costados y el arco del pie.

Peep toe: este calzado se caracteriza por tener una abertura delantera que deja ver el dedo gordo y contiguo del pie. Tan utilizados por la princesa Letizia que se les ha llegado a llamar letizios.

Stilettos: zapatos (no necesariamente de estilo salón), que se caracterizan por tener un tacón de aguja, muy alto y delgado.

Bailarina, manoletina o francesita: como hemos comentado antes, el caso contrario es la versión más plana del zapato de salón, en este caso con puntera redondeada. El nombre de bailarinas viene de su parecido con las zapatillas que utilizan las bailarinas. Pueden ser lisas, con diferentes tipos de adornos, o con un simple lazo de cordón, en cuyo caso las denominamos manoletinas.

Slippers: tal y como su nombre indica, fueron concebidas inicialmente como zapatillas de estar por casa para la aristocracia británica, solían ser de terciopelo y con un escudo bordado en la pala. A medio camino entre una bailarina y un mocasín, ahora estas zapatillas han tomado la calle en multitud de materiales, estampados y colores.

Loafers: es como llaman ahora las bloguers a los mocasines o castellanos, zapato antiguamente masculino que ha sido incorporado al outfit femenino, en versiones incluso con tacón alto, que a mi personalmente me encantan.

Oxford: otro zapato tradicionalmente masculino que se ha incorporado al zapatero femenino, se trata del tradicional zapato inglés con cordones, cuyo diseño puede ser liso o puede incluir como ornamento un punteado a lo largo de la puntera. A mi me parece ideal para la temporada de entretiempo.

Mules: lo que siempre hemos llamado zuecos, ahora se llaman mules, aunque para ser precisos se denomina mules únicamente al zueco con tacón, y esta temporada vienen pisando fuerte.

Espardeñas o alpargatas: planas o con cuya, vuelven a nuestros pies cada verano, y este no iba a ser menos. Generalmente fabricadas en lona y suela de cuerda, pueden ir con cintas para atar al tobillo o sin ellas.

Sneakers: Isabel Marant puso de moda las playeras con tacón o cuña y aquí nos llegaron con el nombre de sneakers, pero realmente cualquier calzado tipo playera o zapatilla de deporte se denomina así, traducción literal del término en inglés. Este año están muy de moda entre las it girls las de la marca New Balance, y por supuesto las eternas Converse que nunca pasan de moda.

Slip ons: en 1979 la firma Vans presentó su modelo más conocido, el Classic Slip-on, que pronto se hizo popular entre los skaters de California. Se trata de un tipo de sneakers que veremos por doquier esta primavera-verano, de hecho ya han invadido todas las tiendas. De tela, con suela de caucho y lo más importante sin cordones (traducción de slip on), algunos las llaman zapatillas de abuelo.

Sandalia: cualquier tipo de zapato abierto, plano o de tacón, que consta de diferentes tiras, correas o pulseras, que dejan casi la totalidad del pie al descubierto. Algunas tienen nombre propio como:

Flip-Flop: todos las asociamos con las típicas chancletas de plástico con las que vamos a la playa, pero las flip-flop son toda sandalia sea del material que sea, cuya suela se sostiene al pie únicamente por medio de una tira o cordón que separa el dedo gordo de los restantes, dicha tira se divide en dos que llegan hasta los laterales del empeine.

Esclavas: en este caso se trata de sandalias con un enlace que entrelaza con el dedo gordo del pie, entre él o sobre varios dedos, pero que no es el único soporte.

Romanas: No son mas que sandalias de múltiples tiras, normalmente que suben más arriba del tobillo (llegando a veces hasta la rodilla), imitando a las antiguas sandalias que utilizaban los gladiadores romanos.

Cangrejeras: al igual que las flip-flop las asociamos con su versión de plástico, aquellas que nos ponían de pequeños para ir al rio. Pero ahora han salido a la calle, gracias a las versiones que Inditex sacó hace dos o tres temporadas y que desde entonces las tenemos verano tras verano, en todo tipo de colores y materiales, con tachuelas, strass, etc.

Abarcas o albarcas menorquinas: de origen balear, consisten en una tira de piel sobre el empeine, y otra más fina que se puede poner bien sobre el empeine o sobre el talón.